Veníamos viajando todos tranquilos, lo más campantes… hasta que el bondi frenó porque otro de la misma línea se había roto e hicieron subir en el nuestro a todos los “averiados” del anterior.
De repente pasamos a ser lo más parecido a un camión con vacas.
“EEEEEHHHH, EEEEEEHHHHH… NO EMPUJEN!!!”
“PERO PARÁ UN POQUITO!!! NO VES QUE ESTÁ MI PIE ACÁ!!!”
“CHE CHE CHE, CUIDADO LA SEÑORA!”
(Chofer mirando por el retrovisor)
“HAGAN LUGAR… POR FAVOR, UN POQUITO MÁS ATRÁS”
Hasta que en el medio de la multitud, ahí donde no entraba ni un alfiler, se escuchó una voz que dijo:
“Señores pasajeros, en esta oportunidad les traigo directo de rrrremate de aduana un espextacular…”
No me acuerdo qué ofrecía, pero vendió todo.
En el caos puede haber una gran oportunidad.
martes, 24 de agosto de 2010
viernes, 20 de agosto de 2010
miércoles, 11 de agosto de 2010
miércoles, 4 de agosto de 2010
El tipo era muy pero muy alto, entonces sus piernas no entraban en el espacio que quedaba con el asiento de adelante. Intentó de todo, pero al final las dejó del lado del pasillo. La gente pasaba y él se volvía a meter adentro. No aguantó más, se paró y se dió con el caño pasamanos en la cabeza.
El mundo no se adapta.
El mundo no se adapta.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)